Chihuahua, Chih.- A un mes del asesinato de los dos jesuitas en Cerocahui, la Diócesis Tarahumara, dijo seguir con la pena y el dolor ante este hecho, el cual conmocionó a toda la sociedad.
"La Diócesis Tarahumara, nos seguimos uniendo a la pena y el dolor de los miembros de la Compañía de Jesús y de todas aquellas personas, familiares, amigos que conocieron a estos hermanos", señaló el comunicado.
Además, refirió que, la sangre derramada siga siendo un ejemplo de fe y confianza en Dios.
"Adelante, la vida tiene que continuar y Dios nos pedirá cuentas de bondad y el amor que hayamos dado y dejado en esta tierra".
Los sacerdotes Javier y Joaquín, fueron abatidos por "El Chueco" el pasado 20 de junio.