“Como el Padre me envió a mí, también yo os envío a vosotros”. Juan (20, 19-23).
Reflexiones para este domingo
1. Él no culpa ni reprueba. En cambio, dice Palabras de paz y les da su mejor regalo, su Espíritu Santo.
2. Toca mis heridas y mi corazón endurecido con tu mano sanadora.
3. Toca mis heridas y mi corazón endurecido con tu mano sanadora.